Por Taiwo Adeshigbin
Cary, Carolina del Norte (WakeMed Soccer Park) – Durante gran parte del partido, los cánticos más ruidosos venían de los aficionados de Pumas de Alabama, hasta que Bumpy Pitch FC le dio la vuelta a la historia.
Bumpy Pitch FC se impuso 2 a 1 a Pumas de Alabama el domingo y se proclamó campeón de 7 contra 7 The Soccer Tournament (TST), llevándose además el premio de un millón de dólares. Con dos goles del capitán Charlie González, incluido el tanto decisivo en el Target Time,
“Fue una locura, es difícil de explicar”, confesó González tras el encuentro. “Se me puso la piel de gallina. No tengo palabras. Gracias a Dios y a todos los que nos han apoyado”.
El partido fue intenso desde el inicio, con ambos equipos creando oportunidades. Los Pumas de Alabama dominaron en la primera mitad, superando al Bumpy Pitch en remates 6 a 3. Sin embargo, todo cambió durante el Target Time, la regla estrella del torneo.
La normativa del Target Time entra en vigor a los 20 minutos, tras la mitad de los dos tiempos. Se establece el marcador objetivo a alcanzar para ganar el partido, calculando el resultado parcial del equipo que va ganando más un gol. Con Pumas por delante 1 a 0 al término del tiempo reglamentario, el marcador objetivo se fijó en 2. Además, durante el tiempo complementario cada tres minutos se retira un jugador de cada equipo hasta que uno marque el gol de la victoria.
Ese fue el momento clave para Bumpy Pitch.
González igualó el marcador con un disparo lejano cuando jugaban 5 contra 5, y más tarde firmó el gol definitivo en el 2 contra 2, aprovechando un error defensivo y definiendo con una vaselina perfecta por encima del portero.
“El año pasado tuve la oportunidad de llevar a mi equipo a la final con otro grupo, y fallé”, reconoció González. “Eso fue lo primero que se me vino a la cabeza. Me dije: tengo que cumplir con mi equipo. Y también tenía a Dios presente en ese momento”.
Pumas de Alabama se adelantó en el minuto 30 gracias a un gol de Miguel Aldair Giorgana Hernández, asistido por Hugo Iván Rodríguez Abundiz. A pesar de haber promediado tres o más goles por partido en el torneo, se quedaron sin marcar en el tiempo complementario, siendo superados 6 a 0 en disparos por Bumpy Pitch.
“Pasas de estar destrozado a sentirte pleno en una hora y media. Es una locura”, dijo el director general de Bumpy Pitch, Alan Ponce. “Esto lo empezamos hace meses, y ver cómo todo encaja… el trabajo, el esfuerzo, todo… es indescriptible”.
De forma notable, tanto el equipo masculino como el femenino de Bumpy Pitch FC alcanzaron la final. El equipo femenino cayó 2 a 0 ante el Team USA, mientras que los hombres se apoyaron en su garra y disciplina defensiva para mantener a sus rivales en solo un gol o menos a lo largo de todo el torneo.
“Confiaba en el grupo que armamos”, afirmó el entrenador Tino Nuñez.
“Nuestros líderes dieron un paso al frente, nuestros porteros estuvieron enormes, y Charlie —nuestro capitán y alma del equipo— mantuvo la calma en los momentos clave. Por eso es nuestro referente. Siempre que tiene el balón, sabes que hay esperanza”.
Bumpy Pitch FC culminó una campaña inolvidable inolvidable, levantando el trofeo y campeón recibiendo un millón de dólares.
